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León XIV marca un nuevo estilo en el Vaticano: el atuendo completo que lo diferencia de Francisco

El papa Robert Prevost sorprendió al mostrarse con la vestimenta papal tradicional, incluyendo muceta y estola, tras su elección como León XIV. Un gesto cargado de simbolismo y continuidad con la historia de la Iglesia.

08/05/2025

Tras el histórico anuncio de su elección, Robert Prevost apareció por primera vez como León XIV en el balcón de la Basílica de San Pedro, saludando a miles de fieles reunidos en Roma. Pero no solo su mensaje llamó la atención: su atuendo completo, con muceta roja y estola bordada en dorado, marcó un regreso al ceremonial más tradicional.

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A diferencia del papa Francisco, que en 2013 optó por una imagen más austera, vistiendo únicamente la sotana blanca, León XIV eligió presentarse con la indumentaria papal completa. Esto incluye la sotana blanca ajustada con una faja de seda muaré, el roquete de lino, la muceta roja, la estola bordada y el solideo blanco, junto con el clásico anillo del pescador, símbolo de su autoridad como sucesor de San Pedro.

Según el protocolo vaticano, estos elementos no solo tienen valor estético, sino profundo simbolismo. La muceta representa la autoridad papal, la estola la consagración sacerdotal y el color rojo alude al compromiso con la fe hasta el martirio.

Las prendas fueron confeccionadas por los históricos sastres Gammarelli de Roma, quienes desde 1798 visten a cada nuevo pontífice. Tal como dicta la tradición, el taller preparó tres sotanas de diferentes talles para que, tras el “Habemus papam”, el elegido pueda aparecer inmediatamente con la indumentaria adecuada.

Hemos vestido a cada papa desde al menos el inicio del siglo XX”, explicaron desde la sastrería a la AFP, revelando que cortan, preparan y cosen las sotanas a mano en tan solo tres días y medio.

Así, León XIV no solo marca un nuevo capítulo en la historia de la Iglesia, sino también una señal de respeto a su liturgia y solemnidad. Un papa que, desde su primer gesto, combina tradición, simbolismo y un mensaje claro al mundo católico.