Las lágrimas y los abrazos fueron protagonistas en una noche donde los recuerdos y el cariño familiar hicieron vibrar a los participantes dentro de la casa.
La emoción se apoderó de Gran Hermano luego de que sonara el Teléfono Rojo y Santiago del Moro comenzara a mostrar a cada jugador una foto familiar. Como expresó Marcelo, “las emociones se agrandan dentro de la casa”, y esta vez no fue la excepción.
Uno de los momentos más emotivos lo protagonizó Eugenia, quien, al ver la foto de sus padres, no pudo contener las lágrimas. "Los extraño mucho, son todo para mí", expresó entre sollozos. Además, aprovechó la oportunidad para enviarle un mensaje a su marido y a su hijo: "Hijo, te extraño todos los días. Pero yo no me pongo mal porque sino me tengo que ir de aquí y quiero jugar un ratito más. Pero te amo y todos los días pienso en vos".