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Opinión y Actualidad

¿Exportar a los Estados Unidos? Primero hay que ganar la discusión en las redes

El crecimiento de las exportaciones de carne parece un hecho. La autocrítica de los ganaderos norteamericanos.

05/11/2025

Por Gonzalo Abascal
Para Clarín

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En el avión presidencial y en vuelo de regreso desde su residencia en Palm Beach, Donald Trump sorprendió: "Podemos comprar carne argentina".

Un par de días antes se había reunido con Milei en la Casa Blanca: "Si lo hacemos, el precio de la carne bajará", siguió Trump. "Los alimentos  bajarán (...) Pronto tendremos la nafta a 2 dólares. Y todo bajó. Lo  único que se mantuvo es la carne. Si les compramos carne, no me refiero a tanta, ayudaríamos a la Argentina, a la que consideramos un muy buen país...".

El comentario, que aquí se recibió con euforia en el gobierno y entre los productores, allá provocó el rechazo, incluso, de los legisladores republicanos -en principio espadas de Trump en el Congreso-, de los estados agrícolas y ganaderos.

La cuestión no es para nada menor. Se habla de plata, y de mucha plata. Según escribió el analista Jorge Castro en Clarín: "Donald Trump cuadruplicó la cuota de carne vacuna para importar de la Argentina, y la llevó a 80.000 toneladas, en medio de las críticas de los ganaderos norteamericanos" (...)

Castro convirtió las toneladas a millones de dólares: "Esto significa, según lo que informó la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes, que entre enero y agosto de 2024 se vendieron a EE.UU. 23.913 toneladas de carne vacuna con un precio de U$S 7.329 por unidad. Ahora todo esto se multiplicará por 4".

En los EE.UU., o al menos entre los dirigentes ganaderos y los medios que les dan voz, el tema fue calificado como una guerra. Y como toda guerra, quieren ganarla.

La novedad es el campo de batalla. ¿Cuál es uno de los escenarios decisivos en la disputa? ¿Dónde se discuten hoy la batallas comerciales y políticas?

Una respuesta la ofreció la semana pasada Ethan Lane, vicepresidente de Asuntos Gubernamentales de la Asociación Nacional de Ganaderos. O, para decirlo sin vueltas, el principal lobbista de los ganaderos en Washington.

"Ethan es arizonense de quinta generación y cuenta con más de 20 años de experiencia en defensa de los intereses de la industria ganadera", lo define la web de la NCBA.

¿Qué dijo este hombre que lleva más de 20 años caminando pasillos y golpeando puertas de legisladores para defender su negocio?

"Si alguien puede encontrar la manera de anticiparse y controlar la discusión sobre su industria en las redes sociales, le recomiendo encarecidamente que lo haga cuanto antes".

Conocedor de los consumos informativos de Trump y de su estilo de gobierno, no dudó: "Esta (la de Trump) es una administración que valora enormemente las redes sociales y a los influencers. No parecen preocuparse mucho por si son reales o una especie de creación de Internet". Cualquier coincidencia con Milei no es pura coincidencia (recordar los retuits a una cuenta en X que publicaba un falso relevamiento de precios)

El lobista fue entrevistado por Semafor, la web de información y análisis exclusivos dirigida al "círculo rojo" estadounidense. "La industria se enfrenta a una amenaza procedente del extranjero, en forma de los esfuerzos propuestos por Trump para apoyar a la industria cárnica argentina", definió el autor en su artículo. 

¿Quién decide si se trata de una "amenaza del extranjero" o una "oportunidad  para bajar los precios"?: "Ya no es necesario gastar dos millones de  dólares en televisión para direccionar una conversación", aseguró Lane. Y agregó, resignado: "sólo se necesitan los influencers y los bots adecuados".

¿Una parte de la suerte de una industria central de la Argentina y de sus exportaciones jugada en la insustancialidad de las redes? ¿Entre la trivialidad farándulera y la agresividad de los trolls? ¿Puede ser? 

Puede ser.