La actriz estadounidense brilló en la alfombra roja del BFI London Film Festival con un elegante vestido vintage de Armani Privé, mientras presentaba Die, My Love, la película dirigida por Lynne Ramsay.
Tras recibir el Premio Donostia en el Festival de San Sebastián, donde reafirmó su elegancia con varios looks de Phoebe Philo, Jennifer Lawrence volvió a acaparar todas las miradas, esta vez en la premiere de Die, My Love durante el BFI London Film Festival. La actriz ofreció una auténtica masterclass sobre cómo pisar una alfombra roja, combinando moda, sofisticación y presencia escénica.
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Para la ocasión, Lawrence eligió un vestido negro de Armani Privé, perteneciente a la colección otoño 2005, con corte halter, escote en V profundo y falda larga, evocando un glamour clásico y atemporal. Completó el conjunto con un abrigo de Conner Ives, decorado con bordados florales y ribetes de piel sintética, que llevó sobre los hombros para no ocultar la elegancia del vestido. El look se completó con sandalias de tiras de Aquazzura, aportando un toque final de distinción.
Su cabello rubio ceniza, peinado con las características cortinas frontales, y un maquillaje de labios oscuros con efecto mordido, reforzaron la estética sofisticada. El toque definitivo lo aportó un collar torque dorado de Glenn Spiro, con colgante escultórico y detalles en diamantes y oro, que elevó el conjunto a la categoría de impecable.
Más allá de la moda, la actriz llegó a Londres para presentar su nuevo proyecto cinematográfico, Die, My Love, dirigida por Lynne Ramsay y coprotagonizada por Robert Pattinson. La película, aclamada desde su paso por el Festival de Cannes, aborda con crudeza y sensibilidad la psicosis posparto de su protagonista.
La crítica ha señalado la interpretación de Lawrence como una de las más intensas y memorables de su carrera, consolidándola no solo como un ícono de estilo, sino también como una de las actrices más potentes de su generación. En esta ocasión, la estrella de Hollywood volvió a demostrar que el cine y la moda pueden convivir en perfecta armonía.