Entre abucheos y aplausos, el primer ministro israelí reivindicó la ofensiva en Gaza, arremetió contra Irán y habló en hebreo e inglés a los rehenes.
En medio de un creciente aislamiento diplomático y bajo la amenaza de arresto internacional, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, inició este viernes un discurso clave ante la Asamblea General de Naciones Unidas entre abucheos y con numerosos delegados que se levantaron y abandonaron la sala en señal de protesta. Antes de viajar a Nueva York, el mandatario había ordenado instalar altavoces en la frontera para que sus palabras fueran escuchadas dentro de la Franja de Gaza, devastada tras casi dos años de guerra.
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Al comenzar su discurso ante la Asamblea General de la ONU, Netanyahu abordó la situación en Medio Oriente y afirmó que Israel ha matado a miles de terroristas en la región, atribuyéndose el mérito por la caída del régimen de Bashar al Assad en Siria y por la devastación del programa nuclear iraní.
“Durante el último año hemos golpeado duramente a los hutíes, incluso ayer. Aplastamos la mayor parte de la maquinaria terrorista de Hamas. Paralizamos a Hezbollah, eliminando a la mayoría de sus líderes y gran parte de su arsenal de armas”, dijo Netanyahu.
Agradeció además al presidente estadounidense Donald Trump “por sus acciones audaces y decisivas”. Sus palabras provocaron gritos de protesta entre algunos asistentes, aunque también recibieron aplausos, especialmente cuando habló de la guerra de Israel con Irán.
En un gesto inusual y cargado de simbolismo, Netanyahu dedicó un mensaje directo a los rehenes que continúan cautivos en Gaza. Primero lo pronunció en hebreo y luego lo repitió en inglés, con la esperanza de que sus palabras llegaran hasta el enclave gracias a un sistema de altavoces instalado por el Ejército israelí en camiones apostados en la frontera.
Netanyahu se dirigió también directamente a los combatientes de Hamas con un mensaje tajante: “Liberen a los rehenes ahora. Si lo hacen, vivirán. Si no, Israel los cazará”. Añadió que sus palabras estaban siendo transmitidas en vivo a los teléfonos celulares de los habitantes de Gaza gracias a operaciones de inteligencia israelí.
Netanyahu afirmó que la guerra en Gaza podría terminar si Hamas acepta las demandas israelíes, entre ellas la desmilitarización del enclave, exigencia que el grupo ya ha rechazado públicamente.
La instalación de altavoces en la frontera
El Ejército israelí confirmó que ha iniciado procedimientos para colocar sistemas de sonido móviles en camiones situados en la zona israelí junto al enclave palestino. La oficina de Netanyahu defendió la medida como parte de “los esfuerzos de diplomacia” y aseguró que el primer ministro “ha ordenado de forma expresa que esta actividad no ponga en peligro a soldados de las FDI”.
Sin embargo, fuentes militares consultadas por la emisora pública Kan y el diario Haaretz describieron la acción como “guerra psicológica”. “Nadie entiende el beneficio militar de esto”, cuestionó uno de los oficiales citados.
La decisión provocó un fuerte rechazo entre familiares de militares y de rehenes secuestrados por Hamas durante el ataque del 7 de octubre de 2023. Lishay Miran-Lavi, esposa de Omri Miran, escribió en la red social X que el mensaje debería dirigirse “a los soldados y los rehenes” para recordarles que “el pueblo de Israel está luchando por ellos y quiere un acuerdo con una mayoría absoluta que les lleve a casa y ponga fin a los combates”.
En una carta enviada al Ejército y al Ministerio de Defensa, varios padres calificaron la medida de “ilegal” y advirtieron que “claramente pone en peligro a nuestros hijos en combate”. “Nunca en la historia del Estado de Israel ha habido un desprecio tal por las vidas de los militares. La guerra que está teniendo lugar en Gaza debe terminar, ya que no tiene justificación”, afirmaron.
La ofensiva israelí ha causado hasta ahora más de 65.500 muertos y cerca de 167.000 heridos, según el Ministerio de Salud gazatí controlado por Hamas, mientras la comunidad internacional critica las restricciones a la ayuda humanitaria.