Los argentinos vencieron por 6-3 y 7-5 a Arends y Van de Zandschulp para que el seleccionado limpiara a los neerlandeses por 3-0.
Pelotas. Y no de tenis. Argentina es un equipo bravo, que tiene jerarquía individual y no se achica en las difíciles. Ya lo habían demostrado Francisco Cerúndolo (21°) y Tomás Etcheverry (61°), quienes supieron responder en los momentos delicados de la serie con Países Bajos, y esta vez lo hicieron Horacio Zeballos y Andrés Molteni. Cuando se les complicó la mano, el campeón de US Open y Molto, de tantas batallas con la camiseta albiceleste -que esta vez fue azul-, se hicieron gigantes, vencieron por 6-3 y 7-5 al dúo de Sander Arends y Botic van de Zandschulp y lograron que el seleccionado se clasificara al Final 8 de la Copa Davis.
Por los éxitos del viernes, el panorama era alentador: de los tres partidos proyectados para el sábado, en caso de que la serie se estirara, solo había que ganar uno. Si le tocaba al Bocón, el mejor rankeado de los nuestros, seguro que iba a estar a la altura. Si la pelota caía en manos del Retu, lo mismo. Pero había algo poético en que Zeballos, quien resignó su descanso post major y sacó pasaje hacia Groningen, pusiera el broche junto a Molteni.
Arends y Van de Zandschulp, el singlista de fuerte latigazo que reemplazó de último momento a Sem Verbeek, les dieron trabajo a los argentinos, que quebraron una vez, mantuvieron todos sus saques y dominaron por 6-3. Los problemas llegaron en el segundo parcial, que pintaba mal y no parecía recuperable. El corazón del dúo lo hizo posible.
De 2-5, a un empujoncito de que los neerlandeses ganaran su primer set de la serie, se pasó al 7-5 con el que Argentina liquidó el pleito. Cinco games en fila, con dos quiebres en medio -el primero de ellos fue eterno-, consiguieron que los dirigidos por Javier Frana sacaran pasaje al Final 8 de Bologna, Italia, donde los ocho mejores de la temporada se batirán a duelo en noviembre.