El entrenador renunció antes de debutar y explicó los motivos: apuntó a la falta de refuerzos y descartó un conflicto con la dirigencia.
La novela terminó antes del primer capítulo. Diego Cocca dejó de ser el entrenador de Talleres sin haber dirigido un solo partido y rompió el silencio este jueves para aclarar los motivos de su sorpresiva renuncia. En diálogo con TyC Sports, el técnico de 53 años desmintió cualquier tipo de enfrentamiento con el presidente Andrés Fassi y explicó que su salida se debió a la falta de refuerzos para armar un equipo competitivo.
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“No hubo un conflicto. Me di un abrazo con Fassi, con los jugadores y con todos en el club. Pero si uno plantea objetivos ambiciosos y no se dan las condiciones, lo más honesto es dar un paso al costado”, sostuvo Cocca. A su vez, aseguró que fue una decisión muy meditada: “Tuve varias noches sin dormir, porque tenía mucha ilusión de trabajar en Talleres”.
El exentrenador de Racing y la Selección de México fue claro al remarcar que su intención era conformar un plantel que pudiera competir en serio. “Ya tengo casi 20 años de carrera. Cuando veo situaciones que ya conozco, prefiero ser cauto. Talleres tiene buenos jugadores, pero después del semestre que tuvo, era clave reforzarse bien y a tiempo”, señaló.
Sobre su conversación con la dirigencia, Cocca fue contundente: “Si el club no estaba en condiciones de sumar incorporaciones, entonces no soy el técnico indicado para este momento. No me interesa dirigir por dirigir: quiero proyectos que apunten a pelear cosas importantes”.
Además, descartó que haya existido una interna con el plantel y entendió el contexto que atraviesan algunos futbolistas: “A Portillo lo viene a buscar River, es lógico que se movilice. Si yo estuviera en su lugar, pensaría más en River que en Talleres, que es un club vendedor. Pero eso va por otro lado”.
Por último, dijo que no habló con Carlos Tevez, su sucesor, pero le deseó lo mejor, al igual que a los futbolistas. “Los jugadores no tienen la culpa de nada, se entrenaron muy bien. Tanto ellos como la dirigencia entendieron mi postura. Esto no es bueno para nadie, pero fue lo más sano”.