Con seis episodios, estrenó la séptima temporada de Black Mirror, la serie de Netflix ganadora del Emmy y creada por Charlie Brooker.
Llegó finalmente la tan ansiada séptima temporada de Black Mirror. La serie de Netflix, famosa por su capacidad para prevenir futuros poco alentadores, vuelve con una nueva entrega que consta de seis capítulos. Entre ellos hay una secuela de la aventura de sci‑fi “USS Callister”, un episodio en el que un un talentoso programador crea una realidad virtual. En ella atrapa a sus compañeros de trabajo para vengarse de sus frustraciones, convirtiéndolos en personajes de un juego de Star Trek, donde los maltrata y humilla.
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Los episodios que componen la serie son: “Gente corriente“, “Bête Noire“, “Eulogy“, “Juguetes“, “Hotel Reverie” y la ya mencionada “USS Callister: Into Infinity”. Cada uno funciona como una pieza autónoma dentro del engranaje temático de la serie.
Según Charlie Brooker, creador de la serie, la nueva temporada visita “el pasado en un par de episodios, pero de manera diferente. También hay momentos emotivos, aunque la tecnología sigue estando definitivamente a la vanguardia, pero contemplativa”. Bajo esta descripción, la serie trata de volver a sus raíces, explorando nuevamente temáticas como la Inteligencia Artificial, la memoria y la relación cambiante que los humanos tenemos con ambas. Temáticas que tanto atraparon a los fanáticos de Netflix por su relevancia innata que se podía percibir iba a ser uno de los temas de conversación.