X
Revista

Posponer la alarma: ¿un buen hábito o una trampa para tu salud?

Mientras algunos estudios sugieren que un despertar gradual podría mejorar el rendimiento cognitivo, otros alertan sobre los efectos negativos de interrumpir el ciclo del sueño. Aquí te contamos lo que dice la ciencia.

29/03/2025

Posponer la alarma varias veces es un hábito que muchas personas practican cada mañana, buscando ganar unos minutos extra de descanso antes de levantarse. Aunque durante años se ha considerado contraproducente, un reciente estudio de la Universidad de Estocolmo ha puesto en duda esta creencia, abriendo un debate sobre los posibles beneficios de esta práctica.

HACÉ CLICK AQUÍ PARA UNIRTE AL CANAL DE WHATSAPP DE DIARIO PANORAMA Y ESTAR SIEMPRE INFORMADO

El estudio, realizado con más de 1700 participantes, investigó los efectos de posponer la alarma repetidamente sobre el cerebro y el rendimiento cognitivo. Sorprendentemente, los resultados mostraron que, en algunos casos, las personas que posponían la alarma no solo no experimentaban efectos negativos sobre la calidad de su sueño, sino que, de hecho, podrían beneficiarse de un mejor rendimiento cognitivo al despertar.

Un despertar más gradual

La doctora Jade Wu, especialista en medicina del sueño, apoya la teoría de que posponer la alarma puede ser positivo, pero con ciertas condiciones. Según Wu, al posponer la alarma, el cuerpo experimenta un despertar más gradual, lo cual permite que los procesos naturales de vigilia, como el aumento de la temperatura corporal y la disminución de la melatonina, se desarrollen de manera más suave. Este despertar menos abrupto podría ser menos perturbador que el de una alarma que obliga a levantarse de golpe.

"Este proceso gradual podría mejorar la sensación de energía y concentración al levantarse", explica Wu, destacando que la clave está en no interrumpir el ciclo de sueño de manera brusca. Al permitir este “respiro”, el cuerpo podría despertar de una manera más natural.

Beneficios en los niveles de cortisol y rendimiento cognitivo

El estudio de la Universidad de Estocolmo también descubrió que los participantes que posponían la alarma varias veces tenían niveles de cortisol más elevados al despertar, lo que les ayudaba a empezar el día con mayor energía. Además, aquellos que realizaron pruebas cognitivas después de despertarse mostraron mejores resultados en comparación con los que se levantaron sin permitir un despertar gradual.

El peligro de la inercia del sueño

Sin embargo, no todos los expertos están de acuerdo con los beneficios de posponer la alarma. El doctor Facundo Nogueira, neumonólogo y jefe del Laboratorio del Sueño en el Hospital de Clínicas, explica que interrumpir el ciclo de sueño de forma repetida puede provocar lo que se conoce como "inercia del sueño". Esta sensación de somnolencia y desorientación, que ocurre al despertar bruscamente durante la última fase de sueño, puede durar varias horas y afectar la concentración y el rendimiento durante el día.

El doctor Joaquín Terán Santos, presidente de la Sociedad Española de Sueño, también alerta sobre los efectos negativos de posponer la alarma. Según él, cuando el cuerpo vuelve a dormir tras presionar el botón de "snooze", interrumpe su acceso al sueño profundo, necesario para un descanso verdaderamente reparador. Esta interrupción prolonga la fatiga y la desorientación, afectando tanto el estado físico como el bienestar emocional.

Consejos para mejorar la calidad del sueño

Para contrarrestar los efectos negativos de la inercia del sueño, los expertos recomiendan mantener una rutina de sueño regular. Según Terán Santos, es esencial acostarse y levantarse a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana, para estabilizar los ritmos circadianos. Además, se debe evitar el uso de dispositivos electrónicos antes de dormir, ya que la luz de las pantallas interfiere con la producción de melatonina.

Otra recomendación es crear un ambiente adecuado para el descanso: mantener la habitación oscura, fresca y silenciosa. Además, un despertador de luz progresiva puede ser útil para un despertar más suave, ya que simula el amanecer y reduce los efectos de la inercia del sueño.