Crítica de Masters del Universo: Revelación, la espectacular serie de Netflix
Kevin Smith dirige esta secuela de la clásica serie de animación de los 80, cuyos cinco primeros episodios ya están disponibles en Netflix. Este auténtico "Blast From the Past" entusiasmará a los que crecieron con los muñecos de Mattel, que ahora podrán gritar con sus hijos aquello de “¡Yo tengo el poder!”
Por Bruno Sol
Para Hobby Consolas
En los últimos años, Netflix ha tenido muy presente el legado de Masters del Universo, la inolvidable franquicia de Mattel que conquistó a la chavalada de los 80, tanto a la hora de producir la excelente She-Ra y las Princesas del Poder y documentales estupendos, como El Poder de Greyskull o el tercer capítulo de la primera temporada de The Toys That Made Us, ambos dedicados a la creación de los juguetes originales y el universo transmedia que generaron en su momento.
La siguiente jugada de Netflix y Mattel ha sido desde luego audaz: reclutar a Kevin Smith (director de Clerks y Mallrats, y conocido fanático de los Masters) para ejercer de director y showrunner de una secuela de la mítica serie de animación creada por Filmation entre 1983 y 1985. Tras ponernos los dientes largos con un tráiler espectacular, la primera parte de Masters del Universo: Revelación ya está disponible en Netflix. Cinco capítulos de 25 minutos que van más allá de nuestras expectativas más locas.
La trama de esta serie, producida por Powerhouse Animation Studios (responsables de la serie de animación de Castlevania), es bastante más adulta que la de Filmation y el subtítulo de “Revelación” no está ahí por casualidad, dado el giro sorprendente que toma a partir del primer capítulo. Pero tranquilos, que en esta crítica no habrá spoilers. Huyan de ellos como si se tratara de las axilas de Stinkor, porque esta primera tanda de capítulos, y sobre todo su desenlace, los van a dejar con la boca abierta.
El arranque de la serie refleja lo que se nos mostró en el tráiler: un auténtico festival de personajes (tanto héroes como villanos) y vehículos que hará brotar más de una lagrima a los que tuvieron los juguetes en los años 80 y desatará el consumismo masivo en busca de la línea Origins que Mattel lleva comercializando desde el pasado año.
El doblaje en castellano es bastante bueno (ojo a la familiar voz que acompaña a la descripción inicial de Eternia y los seres que lo habitan), pero sin desmerecer el gran trabajo de los actores españoles de doblaje, recomiendo de corazón activar desde el principio el audio en versión original, porque su reparto de voces es sencillamente espectacular.
Para empezar tenemos al mismísimo Mark Hamill encarnando a Skeletor, a Sarah Michelle Gellar como Teela (un personaje que acaba erigiéndose en la gran protagonista), a Lena Headey como Evil-Lyn, a Alicia Silverstone como la Reina Marlena y a Chris Wood como He-Man. Smith también ha reclutado a amiguetes de su propio universo cinematográfrico, como Jason “Jay” Mewes, Justin Long, Diedrich Bader, Stephen Root o Harley Quinn Smith (su hija). El fichaje más sorprendente es el de Henry Rollins (el líder de la banda hardcore Black Flag) para dar voz a Tri-Klops, un villano menor dentro del universo MOTU pero que cobra un notable peso en la trama de la serie.
A diferencia de lo que sucedía con Castlevania (o al menos esa es la impresión que nos dio en su momento la adaptación animada del clásico de Konami), en Masters del Universo: Revelación el ritmo de la trama es frenético. Los cinco capítulos se te pasan en un suspiro, mientras van desfilando personajes y localizaciones icónicas. No exagero al decir que más de un mitómano se emocionará al ver ciertos lugares, héroes y villanos, a lo largo de una trama que aporta un nuevo punto de vista sobre ciertos personajes, especialmente ciertos malvados a los que se dota de una sorprendente humanidad.
La animación también está bastante más conseguida que en Castlevania y el diseño de personajes es sencillamente exquisito. El tono general de la serie es sorprendentemente adulto, pero su nivel de violencia se mantiene a raya para que puedan disfrutar la serie tanto grandes como pequeños. Incluso un personaje como Orko, el alivio cómico de la serie de los 80, presenta aquí un enfoque sorprendentemente sombrío, aunque Smith y su equipo de guionistas (entre los que se encuentra el mismo) no han dejado fuera el humor, como queda patente en la referencias al olor a pino que desprende Mossman.
Poco más podemos decir sin caer en spoilers. Nos encanta el protagonismo que cobran Teela y Evil-Lynn, dos personajes femeninos que en su momento (eran los 80) no iban más allá de ser meras comparsas y que aquí soportan sobre sus hombros buena parte de la historia. Habrá quien quede decepcionado ante el menor peso que tienen He-Man y Skeletor, pero esto no es una serie de episodios autoconclusivos a lo Filmation. El arco narrativo está repartido a lo largo de los cinco capítulos, pausando la historia en un cliffhanger que nos hará mordernos los puños hasta la emisión de la segunda parte (que al parecer se compondrá de otros cinco episodios).
A título personal, Masters del Universo: Revelación es la serie que siempre soñé en los años 80, cuando me tiraba sobre la maqueta de mi habitación y colocaba mis muñecos alrededor del Castillo de Grayskull mientras me inventaba mis propias historias (hasta llegué a dibujar mapas de Eternia). Ahora tengo 49 años, pero durante poco más de dos horas he vuelto a ser aquel chaval. Kevin Smith llevaba años en caída libre, pero con esta serie ha demostrado que su amor por la franquicia de Mattel no puede ser más sincero. Es uno de los nuestros.