En las últimas 24 horas hubo 328 casos positivos, según informó el COE de esa provincia.
Catamarca registró ayer un nuevo récord de contagios en 24 horas con 328 casos positivos de coronavirus informados en el último reporte del COE. En los últimos siete días, es la tercera vez que ese récord se rompe: el anterior había sido justamente 24 horas antes, con 285. Además fallecieron cinco personas, algo que solo había ocurrido una vez el mes pasado.
Con este escenario y al considerar que la situación del sistema de salud es extremadamente crítica, el Gobierno resolvió ayer endurecer las medidas e implementar algunas prohibiciones a partir de hoy y hasta el domingo inclusive. La ministra de Salud, Claudia Palladino, reiteró el pedido de mayor compromiso a la población y aseguró que estos contagios son "fruto de actividades no permitidas y protocolos no respetados en el Día del Trabajador".
De los 328 casos, solo 121 fueron confirmados por test de PCR procesados en el Laboratorio Central del Ministerio de Salud, otros 193 por test de antígenos (175 del sistema público y 18 de laboratorios privados) y 14 fueron diagnosticados por nexo epidemiológico. Ayer se realizaron 393 PCR en el Laboratorio Central, lo que indica una positividad del 30,7% de los PCR procesados.
Este nuevo récord superó al de apenas 24 horas antes, y éste a su vez superó a otro que se había registrado el 7 de mayo. Previo a esto y desde octubre de 2020 siempre hubo al menos un nuevo récord por mes en Catamarca.
Con los cinco fallecimientos de ayer se igualó el récord negativo del 23 de mayo. En apenas 12 días de mayo ya fallecieron 29 personas, y el récord se registró el mes pasado con 42. En cantidad de contagios, mayo ya acumula 2.334 y más de 3.500 recuperados.
La preocupación del COE
La ministra de Salud explicó que la situación es especialmente preocupante en Capital, Valle Viejo, Belén y Tinogasta.
"Se volvió a acelerar la multiplicación de casos en los últimos días, probablemente por el no cumplimiento de los protocolos durante el 1º de mayo", dijo.
"Esta segunda ola se asocia con pacientes más jóvenes, con cuadros agudos, que ingresan al hospital con síntomas muy importantes y algunos consultan de forma tardía, permanecen más de 21 días internados y el giro de cama es muy lento. A pesar de haber aumentado la disponibilidad de camas se observa una saturación que genera un estrés sanitario sostenido y afecta a todo el personal abocado a la atención del COVID", remarcó.
En tal sentido, pidió "no minimizar los síntomas y ante la presencia de cualquiera de ellos consultar oportuna y precozmente".
"También tenemos que disminuir nuestro tránsito cotidiano. Les pedimos que se queden en casa, que extrememos las medidas de cuidado y salgamos solo para lo esencial", pidió.