Durante la entrega de las estatuillas entregadas por APTRA, las actrices manifestaron su cariño. Peterson le dedicó gran parte de su discurso a Dupláa.
Este año APTRA las había nominado en la misma categoría, con Gimena Accardi completando la terna. Y luego de que Marley anunciara que finalmente Peterson era la ganadora de la estatuilla, las dos amigas se besaron con mucha emoción. Luego hubo un profundo abrazo, y la ganadora le dijo a su amiga: "¡Te amo!".
En su discurso, la mujer de Martín Lousteau reveló que tenía la esperanza de que el premio fuera compartido con Nancy, pero no pudo ser así. No obstante, gran parte de sus palabras fueron dedicadas a su amiga y compañera, reconociendo el duro trabajo que hicieron juntas.
Con lágrimas, la ganadora fue a recibir su premio, y anunció: "Qué difícil recibir un premio, porque de verdad no siento que sea justo… No hubiera podido haber hecho lo que hice sin vos. Todos sabemos lo que sos", le declaró Laura a Antonia. "Te amamos, sos una maestra. Yo la he visto hacer magia con las escenas", describió Peterson a Dupláa.
"La verdad que pensé que nos iban a dar uno a las dos -insistió-. Nancy: gracias este premio es de las dos. No hubiesen existido ni Laura ni Antonia, vos sos mágica, tenes estrella. Tu alegría de todos los días , nos guió. Sos el sol. Te amamos . Todos los que hicimos 100 días sabemos que este premio es de las dos", y finalizó su discurso -que también incluyó un emotivo pedido por el aborto legal– preguntándole al público: "¿Se nota que la amo, no?".
No es la primera vez que Carla y Dupláa reflejaron su amistad con un beso, ya que también lo hicieron durante el rodaje de 100 días… En el último episodio de la novela celebraron su amor con un beso.
Minutos después Juan Minujín (quien se puso en la piel de Gastón, el marido de Laura) y Luciano Castro (interpretó a Diego Castelnuovo, el novio de Antonia), siguieron los mismos pasos que sus colegas. Al anunciar que la estrella de El Marginal 1 se llevaba el premio en la categoría de actor protagonista de ficción diaria, los dos amigos se dieron un beso para celebrar el triunfo. Porque en 100 días… abundó el amor.