X
Revista

Dormir mejor o la revolución económica de la industria del sueño

El sueño es una industria de miles de millones, con innovaciones como sprays para almohadas, alarmas inteligentes y audífonos de "ruido blanco".

02/03/2019

Cuando el bebé de Kelly Anderson tenía dos meses, ella intentó implementar un programa de sueño, pero no funcionó.

De hecho, el proceso casi la llevó "al borde de la locura".

Anderson desistió del programa, pero después de seis meses sin poder dormir, se dio cuenta de que necesitaba ayuda.

Entonces llamó a Kate Cohen, una consultora del sueño que trabaja en el Reino Unido que ayuda a las familias con niños pequeños a conseguir el descanso que tanto necesitan.

Cohen observó la rutina del hogar y esbozó un programa de sueño, una "especie de biblia" para que los padres puedan mejorar los patrones de sueño de sus hijos.

Pero la asesoría de Cohen no es barata: los precios van desde los US$65 por una hora de consulta, hasta US$522 por un paquete completo.

Anderson siente que valió la pena. "Pagaríamos de nuevo 100 veces más", dice.

Desde que Cohen comenzó su negocio hace dos años y medio, ha tenido más de 250 clientes.

Y no está sola. Productos y servicios relacionados con el sueño están aumentando rápidamente, a medida que el mundo reconoce su valor.

Una industria de miles de millones de dólares

El sueño es una industria de miles de millones, con innovaciones como sprays para almohadas, alarmas inteligentes y audífonos de "ruido blanco" para dormir mejor, que intentan captar nuestra atención.

Está el ejemplo del producto "colchón en una caja" de la empresa Casper, que salió al mercado en 2014.

Los clientes podían desenrollar el colchón en la comodidad de su casa y probarlo durante 100 noches para decidir si les gustaba el producto.

Si no funcionaba, podía ser devuelto.

Philip Krim, uno de los cofundadores de Casper, dice que se dispusieron a reinventar la experiencia de comprar un colchón, como si se tratara de comprar un auto usado en una tienda.

"Estábamos de acuerdo en que comprar un colchón era una de las peores experiencias para los consumidores", cuenta.

Compartieron la idea de que era un producto tan importante en la vida, que hace una diferencia tan grande para la gente, que se pusieron a buscar una alternativa.

"Tiene que haber una mejor manera de comprar este producto", dijeron en aquel entonces.

A algunos inversionistas les gustó la idea y desde su lanzamiento, la empresa ha conseguido más de US$240 millones en financiamiento con capital de riesgo.

Ha surgido una cantidad incontable de otras marcas con el mismo tipo de producto, aunque aún llegan solo a una fracción del mercado.

Y los tradicionales vendedores minoristas que exhiben sus productos en showroom han respondido con un mejor juego.

La tecnología para el sueño

Uno de los mayores vendedores de colchones en el Reino Unido, la empresa Dreams, ha presentado un sistema codificado de colores para ayudar a los consumidores a entender mejor los diferentes productos.

Incluso crearon su propio "colchón en una caja" para los que prefieren esa alternativa.

Mike Logue, director ejecutivo de la firma, reconoce que la gente se puede sentir un poco rara probando los colchones en el centro de exhibición durante el día, pero vale la pena.

"Esta es una compra muy importante, tienes que hacerlo bien", reconoce Logue.

Sin embargo, no se trata solamente de colchones. Las compañías también están investigando como los productos tecnológicos que se usan como prendas de vestir, pueden ser aplicados en el sueño.

Dreams acaba de lanzar una aplicación que monitorea el sueño llamada Napp, que se vende un monitor del tamaño de una piedrecita que se adhiere a tu ropa de cama y registra cosas como movimientos, ritmo cardíaco y rendimiento respiratorio.

Es un ejemplo de una gama de productos que ayudan a la gente a analizar información para poder tomar decisiones como a qué hora irse a la cama o qué temperatura mantener en la habitación para dormir mejor.

Hasta ahora son productos funcionales, pero algunos están diseñados para un mercado más exigente.

¿Una joya?

A primera vista el anillo Oura se ve como una linda joya. Se puede comprar en color plata, negro o con una línea de cinco diamantes.

Pero escondidos en su interior hay sensores que miden el pulso durante la noche, haciendo 250 registros por segundo con el fin de calcular la calidad del sueño.

Como resultado el anillo produce un "hipnograma" que le dice a la gente cómo estuvo su sueño durante la noche, explica Harri Lahtela, director de Oura.

Dispositivos como este, dice, nos ayudan a prestarle atención al sueño tan seriamente como cuando nos proponemos hacer ejercicio.

Lahtela cree que la función del sueño como parte del bienestar general del ser humano ha sido ignorado durante años.

"Estamos encantados de que finalmente está comenzando a tener la atención que se merece", dice.

El cerebro trabaja de noche

Russell Foster, profesor de neurociencia circadiana de la Universidad de Oxford, sostiene que ha aumentado la comprensión de cómo el sueño nos afecta.

"Lo que hemos visto en los últimos años es que cosas muy importantes ocurren en el cerebro, como nuestra habilidad para consolidar recuerdos, procesar información o generar soluciones innovadoras frente a problemas complejos", dice.

"Todas estas funciones son muy importantes en el interior del cerebro durante la noche", agrega.

"En esencia, nuestra habilidad para funcionar durante el día está definida por la calidad del sueño que tenemos en la noche".

También ha quedado claro que no dormir lo suficiente te afecta severamente.

Entre las consecuencias en el corto plazo, explica Foster, está la falta de procesar información con exactitud y la pérdida de atención.

Pero también hay riesgos para la salud en el largo plazo, incluyendo el debilitamiento del sistema inmune, el aumento de la probabilidad de enfermedades cardiovasculares y problemas de salud mental.

Siestas cortas en el trabajo

Como la conciencia sobre los beneficios de dormir está creciendo, los empleadores le están prestando más atención.

La compañía MetroNaps de Christopher Lindholst vende el EnergyPod, una especie de cama reclinable de la era espacial para los empleados para que duerman una siesta rápida en el trabajo.

La gente no está durmiendo lo suficiente y las empresas se han dado cuenta que tienen que hacer algo al respecto , dice Lindhost.

"La tecnología nos mantiene despiertos, la gente se queda hasta tarde viendo películas y trabaja jornadas más extensas", explica.

MetroNaps fue fundada hace 15 años en Nueva York y actualmente vende sus productos en más de 30 países.

Uno de sus clientes es la compañía de software SAP, que instaló uno de los EnergyPod en su oficina de Singapur.

Renate Janini Dohman, vicepresidenta senior de Recursos Humanos, cuenta que ha generado un cambio cultural entre los empleados.

"Es aceptable en nuestra cultura que una persona se cuide para que pueda hacer mejor el trabajo cuando regrese a sus actividades regulares", dice.

Y en eso ella ve un claro beneficio para la organización.

"Sabemos que es ocho veces más probable que la gente se comprometa o tres veces más probable que aumente su productividad cuando la empresa invierte en la salud y el bienestar de los empleados", dice.

"Es importante considerar que hay un impacto en las tasas de productividad cuando tienes empleados que son más saludables".

La noche perfecta

Foster puede ver el cambio cultural que está ocurriendo en los lugares de trabajo.

"Hemos avanzado desde la década de los 80, cuando era casi una medalla de honor trabajar excesivamente. Ahora un empleador receptivo diría que te vayas a casa", dice.

Pero advierte que la industria del sueño es joven y que el análisis de lo que funciona y lo que no funciona aún no está claro.

"Muchas de estas cosas son presentadas con muy poca evidencia, entonces como científico, me opongo. Sin embargo, si te funcionan y mejoran tu hábitos al dormir, simplemente hazlo", comenta.

Después de todo, el mundo no bajará sus revoluciones pronto. El sector del sueño seguirá creciendo, en la medida que las empresas seguirán ofreciéndonos maneras de conseguir el descanso perfecto.

"Creo que los inversionistas ven que la industria del sueño se está convirtiendo en un pilar real del bienestar, que la tendencia del bienestar está en su infancia y es emergente", dice Krim de la firma Casper.

"Los clientes continuarán gastando más y más en su ambiente para dormir mejor".