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Espectaculos

Caso Darthés: quitaron una estatua del "Bambino" Veira de una pizzería porteña

El exfutbolista y entrenador fue condenado por intento de violación de un menor.

13/12/2018

A las nueve de la mañana de este miércoles, cuando recién terminaba de abrir el negocio, el encargado de "Lo+Hot Pizza", en Boedo, revisó su celular. En la pantalla había un alerta de mensaje que desplegó y leyó. No era más que una línea, una indicación: "Sacá la estatua de la puerta".

La estatua, hecha a escala e imagen de Bambino Veira, está guardada. Fuera de la vista. En agosto había sido colocada en la entrada del local, en avenida Boedo al 400, a modo de homenaje al ex jugador y director técnico. Pero después de sucesivas quejas de vecinos y de la denuncia de violación que el martes hiciera pública la actriz Thelma Fardin contra Juan Darthes, decidieron sacarla.

"Bien temprano el dueño nos dijo que no le parecía que era una figura para tener en la puerta. Por los reclamos que hubo y más con el último caso de Juan Darthés", dijo el encargado del local de pizzas a Clarín. Y siguió: "El dueño no quiso hacer sentir mal a nadie. La estatua del Bambino se pensó para Boedo, ligada a que fue jugador y director de San Lorenzo".

 En la práctica, no funcionó. La imagen provocó incomodidad y rechazo de una amplia porción de los vecinos de Boedo. "Muchos se acercaban a la barra y nos preguntaban por qué teníamos una estatua de un violador", reconstruyó el encargado.

Y esas palabras, según pudo comprobar Clarín, también se repiten a lo largo de la avenida Boedo y en la intimidad de los departamentos de la única torre de la cuadra: "Había quejas y pedidos para que la sacaran de la vereda". Para muchos la estatua era una provocación y la "exaltación popular de un violador pedófilo".

El 4 de abril de 1988, Veira fue encontrado en primera instancia culpable del delito de tentativa de violación y promoción de corrupción de menor, siendo condenado a cuatro años de prisión. La Cámara del Crimen revocó la condena y absolvió a Veira aplicándole el beneficio de la duda. El 24 de abril la Corte Suprema de Justicia consideró arbitraria la decisión de la Cámara y ordenó dictar una nueva sentencia. El 30 de agosto de 1991, la Sala VI de la Cámara lo encontró culpable de violación de un menor, y lo condenó a seis años de prisión, siguiendo el voto de la jueza Carmen Argibay. El 4 de octubre de 1991 fue enviado a la cárcel para cumplir la condena.

El 8 de septiembre de 1992 la Corte Suprema volvió a intervenir y calificó el delito como “intento de violación” y le redujo la pena a tres años. Como Veira ya había cumplido más de un tercio de la condena, quedó en libertad condicional el 17 de septiembre de 1992, luego de cumplir once meses de cárcel.

Pocos días antes de la liberación, Ricardo Quesada, el abogado de la víctima en una entrevista con Clarín, dijo: "Que ese señor (por Veira) recupere su libertad no tiene que confundir a la gente. Nadie debe pensar que deja la cárcel porque cometió un delito menor o porque se comprobó que no hizo nada. Todo lo contrario. El fallo de la Corte fue muy claro: los ocho ministros que votaron consideraron que hubo un delito grave, que Veira fue el autor de ese delito y que, en consecuencia, es criminalmente responsable de intento de violación de un menor".