“Mi casa era un infierno”, recordó la periodista en una entrevista profunda.
Maju Lozano ofreció un desgarrador testimonio en "No se puede vivir del amor", el ciclo de radio que conduce Franco Torchia por La Once Diez. La conductora habló, sin anestesia, sobre todo lo que le tuvo que padecer a causa de la enfermedad de su padre, que murió en 2012.
A corazón abierto, Maju le contó a Franco Torchia qué fue exactamente lo que sucedió con su padre: "El tenía, por decirte, una bipolaridad muy alta y psicosis maníaco depresiva. Pero no estaba diagnosticado, no había tratamiento. Entonces, era el famoso 'enfermo de los nervios'. Me decían: 'Mirá que tu padre tiene mucho carácter'. No era que tenía mucho carácter, era que estaba loco de la cabeza y había que medicarlo. No había mucha vuelta para darle. Estaba pirucho, pobre viejo, hermoso".
"Mi papá falleció en 2012, a pocos meses de que naciera Joaquín, mi hijo -siguió contando Maju Lozano-. Cuando nació, mi viejo ya estaba despidiéndose casi. Igual tardó mucho, como todo lo que hacía él; para todo se tomaba su tiempo. Era un rompehuevos hasta para morirse".
En la misma charla radial con Franco Torchia, Maju explicó: "Hoy un enfermo bipolar tiene una vida absolutamente normal. A mi papá le agarraba por momentos y el último tiempo fue más controlado. Lo que pasa que con tantos años de medicación ya tenía el cuerpo devastado y tenía problemas más físicos que psíquicos. El médico nos decía que era un tipo de setenta años pero con un físico de un tipo de cien, ya no caminaba".
"Me costó entender qué tan perjudicial había sido la enfermedad de mi padre para mí. Había como una confusión muy grande de '¿Qué habré hecho?'. Era como un castigo. Me costó muchos años de terapia pero, yo no recuerdo no haber deseado que mi papá se muriera, porque yo sentía que era la única manera de vivir en paz. Mi casa era un infierno, una bomba de tiempo", evocó Maju Lozano.