El municipio llegó a un acuerdo con los dueños del lugar para tirar una pared y abrir una calle. Los vecinos habían denunciado la venta de droga.
Con palas hidráulicas, el municipio de San Miguel empezó a demoler el predio donde encontraron asesinada a Sheila Ayala, 15 días después del hallazgo de su cuerpo y en medio de los reclamos de los vecinos, que denunciaban que el lugar se había convertido en tierra de nadie.
La nena de 10 años fue secuestrada por sus tíos, quienes la mataron y escondieron por cuatro días. Rodeados por la búsqueda, tiraron el cuerpo al callejón que se formaba entre una medianera y el paredón de una fábrica.
El predio es de la empresa Panizza, dedicada a la recolección de residuos, que llegó a un acuerdo con el municipio para que la pared de entrada se tire abajo y se pueda pavimentar una calle que atraviese el campo.
Con el paso de los años, el lugar tuvo varias funciones. En un momento llegó a ser un espacio dedicado a festivales de chamamé. Luego, fue ocupado por seis familias que lo lotearon y construyeron adentro. Según informaron en El Diario de Mariana, esas personas fueron trasladadas a hoteles mientras se las reubica. Mientras tanto, las denuncias de los vecinos caen sobre el predio: aseguran que fue tomado y es usual ver cómo se vende y se consume droga y alcohol.
La noticia de la demolición del lugar llega una semana después de que el fiscal del caso, Gustavo Carracedo, visitó el predio para hacer trabajos complementarios de la investigación.
Cuando se conoció que Sheila había sido asesinada por sus tíos en el complejo, la broca explotó en el barrio. "La gente está indignada porque se sabía lo que pasaba acá adentro", dijo uno de los vecinos en aquél momento, mientras se desataba una lluvia de piedras contra el lugar y contra los policías que participaban del operativo.
Con el paso de las horas se conoció el testimonio de los tíos de la nena, que en la comisaría declararon que habían secuestrado y asesinado a su sobrina. "Tomamos alcohol y droga y no sabemos cómo llegamos a eso", dijeron.
El juez de San Martín Mariano Grammatico convirtió la aprehensión de los tíos de Sheila en detención formal y ambos deberán afrontar el juicio como coautores del crimen.
Según la acusación del fiscal, el tío quedó acusado como coautor del delito de "homicidio doblemente agravado por alevosía y por tratarse de un femicidio". La tía, por su parte, está acusada por el delito de "homicidio agravado por alevosía" en calidad de coautora.