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País

El juez que rechazó detener a Pablo Moyano: "No me van a correr con aprietes"

Luis Carzoglio realizó una conferencia de prensa en donde afirmó que fue amenazado telefónicamente.

16/10/2018

El juez Luis Carzoglio, quien rechazó detener a Pablo Moyano, dijo hoy que no lo van a "correr con aprietes", en referencia a las amenazas telefónicas que recibió. "Soy imparcial, no me voy a dejar influenciar", dijo en declaraciones a los medios.

El pedido de detención había sido planteado por el fiscal general de Lomas de Zamora Sebastián Scalera, quien tiene a su cargo una investigación por asociación ilícita vinculada a la barra brava de Independiente, club del cual el líder de Camioneros es vicepresidente.

Antes de que se conociera la decisión de Carzoglio, la mujer del juez denunció que recibió dos llamados telefónicos en los que una persona amenazó de muerte a toda la familia del magistrado. "Es verdad, mi señora hoy recibió dos llamados telefónicos a las 11.10 y 11.20 de la mañana amenazándola de muerte a ella y a mí".

El juez relacionó las amenazas recibidas a que se había filtrado antes su resolución en la que rechazaba la detención de Moyano. En ese sentido, Carzoglio aseguró: "La filtración de la resolución se la adjudico al personal de la fiscalía general de cámara de Lomas de Zamora, que se llevó de acá el expediente. A los 20 minutos ya estaba en las redes la resolución".

"Las amenazas fueron con posterioridad a haber hecho la resolución y cuando había trascendido la resolución", enfatizó Carzoglio.

Por la causa ya fueron detenidos el exdirigente de Independiente Noray Nakis y el jefe de la barra brava, Pablo "Bebote" Álvarez, entre otros barras. Hugo Moyano, presidente del club, también figura como imputado. "El juez se la bancó, ha tenido la suficiente grandeza para no aflojar ante las presiones de funcionarios", dijo hoy Hugo durante un acto frente a una sede de la Secretaría de Trabajo, en Callao al 100, frente a 5 mil gremialistas.

A continuación, el juez Carzoglio apuntó contra los medios. Mostró una actitud defensiva, especialmente frente a diversos periodistas y a La Nación y Clarín, que informaron acerca de  sus controversiales causas y sus explicaciones pendientes en la justicia. El juez consideró esas informaciones como una "campaña mediática que se ha realizado en mi contra con el objeto de afectar mi imparcialidad".

Luego, aseguró que la información que dieron los medios "únicamente pudieron haber provenido de la procuración general de la provincia de Buenos Aires", que dirige el Julio Conte-Grand.

Finalmente, Carzoglio defendió su resolución y afirmó: "A mi como juez no me van a apretar ni perseguir con este tipo de maniobras. En este país se tiene que terminar con los aprietes, las amenazas y con perturbar la acción de la justicia".

Sobre las fundamentaciones de su resolución, Carzoglio no explicó demasiado. "Es una conferencia de prensa y las pautas las pongo yo - sentenció enfático - el juez habla por sus fallos".