En caso de confirmarse que el joven estaba armado, como asegura esta mujer, podrían quitarle al caso la figura de la alevosía.
Esta tarde, una mujer se presentó de manera espontánea en la fiscalía de Gualeguaychú y declaró que vio que el arma de fuego que mató a Fernando Pastorizzo la tenía él y no Nahir Galarza, la adolescente detenida por haber confesado que le pegó dos balazos a su novio.
La testigo tiene 55 años, es ama de casa, y conoce a algunos integrantes de la familia Galarza. Dice que presenció un momento de violencia entre ambos chicos y que el arma la tenía Fernando.
Según reprodujo Clarín, la mujer no negó haberse presentado a la Justicia, aunque tampoco quiso dar precisiones a este medio. "No tengo nada para declarar, no tengo nada para decir", se limitó a responder.
Al hacer una reconstrucción del caso, el fiscal Sergio Rondoni Caffa informó que el primer disparo que recibió Fernando fue de espaldas. Se cayó de la moto -una scooter 110 con ruedas finitas- boca arriba y entonces recibió el segundo disparo, de frente. Ambos fueron en el tórax y los dos le atravesaron el cuerpo.
Como el primer disparo fue de espaldas, se descarta que Fernando lo haya efectuado. Esa posibilidad es negada por todas las partes. Incluso, por la defensa de Nahir. "¿Que se haya matado solo, por la espalda? Es imposible que se pegue un tiro por la espalda. El primer proyectil, que creo que es el mortal, le ingresa por la espalda. No se puede haber matado solo", dijo Víctor Rebossio, abogado defensor de Galarza.
En caso de confirmarse que Fernando estaba armado --tal como asegura esta mujer--, podrían quitarle al caso la figura de la alevosía, que sería rebajar bajo la indefensión de la víctima. El dato es fundamental, ya que si se demuestra que entre Galarza y Pastorizzo había un vínculo y que además se actuó con alevosía, Nahir sería condenada a prisión perpetua.